Alegato final
Llevamos ya tres semanas en casa. La
adaptación está siendo dura. Hemos vuelto sin dinero y sin trabajo.
Pero hemos vuelto felices.
A lo largo de estos ocho meses hemos
aprendido, hemos crecido, hemos vivido, amado, sentido, visto, olido
y tocado. Hemos caminado y corrido. Hemos cogido autobuses,
autocares, trenes, aviones y minivans. Hemos ido en barcos, en
barcas y en bañeras flotantes. Hemos hecho surf y Muay Thai. Hemos
ido en bicicleta y hemos nadado durante horas. Hemos visto delfines y
ballenas. Y canguros y koalas. Hemos visto monos, muchos monos, y
vacas callejeras. Hemos buceado entre peces de colores, tortugas y
tiburones. Hemos comido pescado fresco en la playa y noddle soup
en Navidad. Hemos conducido una furgoneta a través del desierto y de
la selva. Hemos dormido en la playa, en albergues, en hoteles, en
tiendas de campaña, en casas ajenas y en furgonetas. Hemos bailado
sin música y con ella. Hemos cantado. Hemos encendido hogueras y
apagado velas. Hemos comido en la calle. Hemos visitado templos. Nos
hemos sentado a descansar. Hemos visto las mejores playas y subido
las montañas más altas. Hemos pasado frío y calor. Nos hemos reído
y hemos llorado. Hemos conocido a mucha, muchísima gente de todas
partes del mundo y hemos brindado en miles de idiomas.
Y de todo eso ¿qué nos queda? Pues
cerrar los ojos y cogernos las manos.
-Te toca, transpórtame.
-De acuerdo....mmm... Estamos sentados
en unas sillas muy pequeñas. En la calle. Bebiendo Saigon Green...
-Estamos en Saigon.
-Sí. De repente aparece Juliane. Lleva
una botella de ginebra en la mano.
-Porqué ayer le robaron el bolso
delante nuestro. Casi ni nos dimos cuenta. Ahora no tiene dónde
guardar las cosas.
-Exacto. Va hacia el tenderete de los
batidos. Ha quedado allí con Henrik y nos invita a unirnos.
-Y vamos...
-Sí, vamos... Te toca.
-Vale... Suena Bob Marley. Estamos
viendo el atardecer desde la mejor hamaca de todo Kho Tao.
-La del rastas...
-Sí...
-Sí...
Y es que los sueños solo van unos
pasas por delante de nosotros. Solo hay que correr un poco para
alcanzarlos. Y superar esa distancia que nos separa de ellos es solo
cuestión de valor.
Benvinguts a casa, aquesta experiència segur que sols es el principi del vostre caminar junts. Seguiu somiant i nosaltres amb vosaltres des de distancia.
ResponderEliminarPetons.
Mami